Curiosidades y coincidencias en las portadas de las novelas, y otras historias

Echándole un ojo a las novedades editoriales, me topé con un par de libros que me hicieron pensar que, una, me había equivocado de fecha; dos, se trataba de ediciones de bolsillo de novelas ya publicadas. Pues ninguna de las opciones. En realidad eran títulos distintos con portadas muy similares a otros publicados hace poco tiempo.

Uno de ellos era Lo que moja la lluvia, muy similar a las portadas de En un rincón del alma (2010), y de Viví años de tormenta (2o12). En los tres casos, paraguas rojo, letra roja, fondo desvaído y mujer vestida de negro.

Portadas muy parecidas con paraguas incluido

 

Otras dos novedades, La lista de los nombres olvidados y Atardecer en París, comparten con La sonrisa de las mujeres (2012) la chica de espaldas, el toque el toque rojo en la indumentaria, y la Torre Eiffel al fondo. En el caso de las dos últimas, con el agravante de ser del mismo autor, Nicolas Barreau. Todas se desarrollan en la ciudad de París pero, en serio, todos los libros que tengan como escenario Madrid deben tener en su portada a la Cibeles?

Portadas con París de fondo

También me llamaron la atención otras dos portadas por su cierto parecido: Al mal tiempo, mejor cara (me gustó muchísimo esta cubierta, y por eso pasa a mi lista de futuribles, imaginen qué rigurosos serán mis criterios de selección), y Tan frescas. Me apeteció poner un madurito explosivo entre tanta mujer, que se ven muy solitas…

Portadas con "maduritos"

Otra curiosidad, la cubierta de la última novela de Fernando Delgado, También la verdad se inventa, que parece la versión senior y nocturna de El principito aunque, según la sinopsis, es ligeramente más atrevida…

Similitudes entre las portadas de Fernando Delgado y la de El principito

Por cierto, la cubierta de El principito, debe de ser una de las más universales (seguramente por ser un dibujo del propio autor), ya que repite en todos los idiomas, alemán, inglés, italiano, francés, griego…

principitos

Porque a veces sorprende la disparidad de criterio de las editoriales para un mismo título. Por ejemplo, Mañana lo dejo. La elección francesa es mucho más adecuada para un libro tan alegre, tanto por su contenido como por su tono. No entiendo por qué en España se eligió una portada tan triste y tan desacertada… (¡cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia; entre el título y el dibujo parece un manual de autoayuda para abandonar los malos hábitos alimenticios!).

Versiones de la portada de Mañana lo dejo

Por último, dos portadas recientes que me han encantado (igual que sus respectivos libros). Son de Seix Barral cuyos diseños -no sé si será por la combinación de colores blanco/rojo y el fondo blanco- me suelen gustar mucho. La primera es Intemperie, muy sobria, como la novela. La segunda, La ridícula idea de no volver a verte, una fotografía preciosa aunque, en este caso, el nexo con el contenido es tan sutil que mi limitada perspicacia no alcanza a captarlo… (se admiten sugerencias y/o interpretaciones).

Portadas de Intemperie y La ridícula idea de no volver a verte